La Diócesis de Chiclayo fue testigo de una celebración especial con motivo del quinto aniversario episcopal de Monseñor Edinson Edgardo Farfán Córdoba, O.S.A. En una solemne eucaristía presidida por el Obispo de Chiclayo, el día sábado 4 de enero de 2024 a las 8:00 de la mañana, en la Catedral de Chiclayo; el Santo Pueblo de Dios se reunió para dar gracias a Dios por su vida y su ministerio pastoral.

En su homilía, Monseñor Farfán compartió una profunda reflexión sobre su camino vocacional y el significado de su misión como pastor al servicio del pueblo de Dios. Agradeció a Dios por haber guiado su vida desde el bautismo y por la formación espiritual recibida en su familia, que sembró en él el amor a Dios, el compromiso con la oración y el servicio a los más pobres.

"Todo lo que soy se lo debo a la gracia de Dios. Él me ha sostenido y guiado en cada etapa de mi vida: como laico comprometido, como religioso agustino, como sacerdote y ahora como obispo diocesano. Mi vocación y mi ministerio han sido moldeados por su amor y por el llamado a servir con humildad y entrega", expresó.

Un recorrido pastoral al servicio de la Iglesia.

Monseñor Farfán recordó con emoción su experiencia sirviendo en diversos lugares del Perú, incluyendo la selva, la sierra y la costa. "Dios me ha enviado a distintas partes para prepararme, y ahora me tiene aquí, sirviendo a esta querida Iglesia particular de Chiclayo", afirmó.

Subrayó que el episcopado no es un título de superioridad, sino un ministerio de servicio basado en la comunión y el acompañamiento del pueblo. Inspirado por las palabras del Papa Francisco, destacó la importancia de ser un pastor cercano al rebaño, caminando a veces adelante para guiar, en medio para animar y detrás para escuchar y acompañar los nuevos caminos que el pueblo de Dios descubre.

Una iglesia de comunión, participación y misión.

Monseñor Farfán también destacó la necesidad de fortalecer la vida espiritual como base para la misión pastoral. Invitó a los fieles a "subir a la montaña" de la oración diaria para renovar el compromiso con el proyecto de Jesús: construir una Iglesia comprometida con la justicia, el amor y el servicio.

Expresó, además, su deseo de ser siempre un instrumento de misericordia y compasión para el pueblo de Dios. "Le pido a la Virgen del Buen Consejo que me guíe en cada decisión y me permita seguir construyendo una Iglesia unida, participativa y misionera", manifestó.

Un llamado a la esperanza y al compromiso.

Concelebraron la Santa Misa los sacerdotes, P. Vicent Ventura Valdivia, Párroco de “Santa María” Catedral de Chiclayo, Vicarios Parroquiales, P. Jorge Luis Sánchez Mora, P. Elver Alexander Quispe Milián y Juan Mechán Sánchez, Emerson Lenin Lizana Enriquez; P. José Antonio Jacinto Fiestas, Director del Pre Seminario “Santo Toribio de Mogrovejo” de Chiclayo, P. Fidel Purisaca Vigil, Párroco de “María del Perpetuo Socorro” de Pomalca y P. Jorge Magail Mallorga, O.S.A.

La celebración fue un momento de agradecimiento y alegría compartida por toda la comunidad diocesana, que reconoce en Monseñor Farfán a un pastor cercano y comprometido. Su mensaje de fe, esperanza y amor al prójimo sigue siendo una fuente de inspiración para quienes forman parte de esta Iglesia particular de Chiclayo.

Chiclayo, 30 de diciembre de 2024.

P. Fidel Purisaca Vigil

Director

Oficina de Medios de Comunicación Social

Diócesis de Chiclayo – Perú.